Vamos a pasar revista a otras construcciones rurales quizá menos conocidas para la mayoría, aunque muy estudiadas por distintos expertos y que suponen un patrimonio histórico cultural que supone gran parte de nuestras vicisitudes rurales en la lucha por la supervivencia económica en épocas de máximas necesidades que evidenciaron la imaginación y el saber hacer de nuestro patrimonio humano agropecuario.
TEITOS
Con este nombre se conocen a unas cabañas localizadas casi exclusivamente en la zona astur-leonense, aunque también aparecen a la zona noroeste de Zamora y parte del noreste de Portugal. Generalmente se encuentran ubicadas en las denominadas brañas (zonas altas de pastos), siendo las más importantes y conocidas la existentes en el Parque Natural de Somiedo en Asturias.
Estas construcciones no tienen nada que ver con las que hemos ido describiendo de piedra seca pues, entre otras cosas, difieren en que su techumbre no es de piedra.
Son cabañas vivienda y disponen de una forma cuadrada o rectangular y el muro se realiza por mampostería de piedras y la techumbre de un entramado de madera sobre la que se añade una cubierta vegetal, generalmente de tallos de escoba de monte, muy abundante. Además del acceso a la entrada, que es adintelada, dispone de ventanas laterales y a veces frontales. La longitud de la cubierta vegetal sobrepasa la altura del muro proporcionando sombra y se conformaban a cuatro aguas.
Estas construcciones son ancestrales y tieien muchoa apogeo enotros países, especialmente en zonas húmedas, ya que como es sabido una de las formas de mantener una temperatura unifrme es cubriendo las cabañas con material vegetal.
Las primeras cabañas disponían en el interior de un único espacio para el pastor y animales, que fueron evolucionando a dos espacios e incluso hasta convertirse en dos plantas donde en la parte inferior se albergaba el ganado.
Estas construcciones se han venido conservando con el tiempo y no han sido muy estudiadas en general por expertos.
Sin embargo en estos años se está intentando recuperar las más dañadas, principalmente por el arreglo de las techumbres, con el inconveniente de que le oficio de teitador ha ido despareciendo en los últimos años, aunque existen Asociaciones que se encargan de mantener viva la pervivencia de estos reparadores de techumbres con cursillos y prácticas.
*** Estas construcciones se asemejan en gran medida a las pallozas de la zona de El Bierzo y la provincia de Lugo.
*** La palabra teito deriva del latín “tectum”, que quiere decir techo.
