De las últimas etapas históricas por las que ha atravesado el Alto Guadiana o “Lagunas de Ruidera”: la “Aristocrática”, la “Burguesa” y la actual, que sería la “Proletaria”; masiva, desnortada y caótica; esta última sería el de mayor coste medioambiental para este paraje natural ¡ÚNICO! Tenemos en este día, sensaciones de fracaso y sufrimiento, al ver los riachuelos y regueras de nuestra infancia atestados de… ¡Lágrimas…! Y como su voz es la mudez, tal vez busquen el exilio, para no perder la melodía de sus nombres; huyendo de la realidad humana y de los “anillos mágicos” de quienes deberían velar por este entorno y que nuestro entendimiento no es capaz de comprender qué “deshojan en la niebla de sus cerebros…”. Una vez, hace muchos años, no recuerdo el lugar, leí en una pintada: “Cuando reflexionemos sobre nuestro siglo XX, no nos parecerá lo más grave las fechorías de los malvados, sino el escandaloso silencio de las buenas personas…”.
Salvador Jiménez Ramírez