Ayer por la tarde a las 18:30 horas, en el Salón de Actos del Mercado Municipal de Tomelloso, ha tenido lugar las I Jornadas Nacionales sobre Cuevas Enológicas, un interesante encuentro que ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Tomelloso y de la Asociación de Amigos de las Cuevas de esta misma ciudad.
En el acto, han estado presentes el presidente de la asociación tomellosera, Jesús Andújar y miembros de la misma; la concejala de Turismo, Rocío Valentín; los concejales del equipo de gobierno, Eloísa Perales y JesúsLara, Ángel Bernao como presentador del acto; el maestro tinajero, José María Díaz y representantes de las dos asociaciones invitadas como han sido: la Asociación Cultural “La Serratilla” de la localidad valenciana de Utiel -un colectivo dedicado a poner en valor el patrimonio de su ciudad, especialmente de sus cuevas bodega- y de la “Asociación de Bodegas y Cuevas de Dueñas” de Palencia, que tiene como objetivo preservar y proteger el exclusivo patrimonio que son las bodegas y cuevas del municipio palentino.
En este acto se ha puesto de relieve la importancia cultural, enológica y arquitectónica de las Cuevas de Tomelloso y de otras localizadas en diferentes puntos de España.
La presentación ha corrido a cargo de Ángel Bernao, coautor del libro junto a su hijo Sergio titulado “Historia de una ciudad: Las cuevas de Tomelloso”. Una obra única de carácter técnico que aborda el análisis de todos los patrones que dieron forma a estas construcciones y donde se muestra todo el tesoro escondido debajo del suelo de la localidad y que todo el mundo debería tener en la mesita de noche.
Bernao en sus primeras palabras, realizó una alusión especial con relación a los sucesos acontecidos por la DANA en Valencia y parte de la provincia de Albacete, en la que la Asociación de Utiel también estaba afectada, deseando la pronta recuperación y vuelta a la normalidad de todas las personas que han sufrido el deterioro de sus viviendas y de las distintas calles.
Continuó agradeciendo a las dos Asociaciones que habían llegado a Tomelloso por su presencia en la localidad indicando que a partir de ese momento “era su segunda casa
Realizó un vasto recorrido presentado los rasgos más significativos de la ciudad para que las asociaciones conocieran un poquito de Tomelloso, aportando datos relevantes y mencionando su patrimonio cultural rodeado de grandes pintores, escritores y escultores.
También hizo alusión a otros datos de su población y geográficos, así como de sus características geomorfológicas y como no de su rico sector agrario y de las distintas cooperativas, empresas vitícolas, destilerías, así como los emblemas agrícolas de la localidad en cuanto a cuevas, bombos y chimeneas.
Recalcó la importancia de la agricultura como medio económico fundamental de la población, haciendo una pequeña reseña histórica de su evolución desde sus inicios en 1530.
En un segundo aspecto, aportó distintos datos y cualidades de la economía agraria de la localidad en cuanto a la vid -su evolución y su situación actual- y otros cultivos como el olivar, el almendro o el pistacho.
Sobre las cuevas de Tomelloso quiso dar un paseo por el origen de las construcciones y todo el proceso llevado cabo y su gran importancia, repercusión y trascendencia en las economías de las familias agrarias, haciendo una descripción de estas joyas arquitectónicas.
Para concluir, expresó la importancia de las actuaciones de las Asociaciones que promocionaban y ponían en valor las cuevas y bodegas y la gran repercusión en la economía de muchas localidades de España por la elaboración de vinos, indicando el paso de las Asociaciones venidas a Tomelloso, de las que “pretendemos aprender mucho”, poniendo en valor su antigüedad y su trayectoria que era necesario conocer, así como intentar sacar conclusiones válidas para posibles futuras actuaciones.
Carlos Javier Gómez-Miota, como representante de la Asociación de Utiel, destacó la importancia de crear sinergias con distintos colectivos.
Realizó un repaso histórico sobre las primeras construcciones donde se elaboraba vino, en una ciudad como Utiel con una marcada tradición vitivinícola y donde las primeras referencias de cuevas, datan del S. XIII siendo utilizadas como pasadizos del medievo para defensa.
El 5 de mayo del año 1387 afirmó que se construyó la primera cueva-Bodega y ya en el Siglo XVI una gran zona de la ciudad estaba hueca y con la problemática existente de producirse importantes hundimientos.
La primera tinaja que se construyó fue en el año 1725 y el tipo de elaboración de vinos se basaba en dos modelos: uno el tradicional y otro buscando la tonalidad con un color más intenso.
En el año 1927 se construyó el edificio de la Cooperativa Agrícola de Utiel y que después tuvo distintos usos como refugio en la Guerra Civil o como espacio de recreo.
Ya en el año 1998, se empieza a movilizarse la sociedad para intentar recuperar las cuevas-bodega.
En los años 2014-2015 se dio un paso importante para reconocer el valor histórico, cultural y turístico de estas construcciones y se está intentando “generar conciencia de ser utielano defendiendo el valor de las cuevas-bodega”, afirmó.
Dentro de las actividades de la Asociación destacan la vuelta a la elaboración de algunos vinos en tinajas, visitas a bodegas y se está catalogando el número de cuevas-bodega “que podríamos estar hablando de unas 1.200 aproximadamente”.
Para finalizar su intervención valoró la posibilidad de hacer planes conjuntos de actuaciones con otras ciudades y propuso una iniciativa como es la creación de una Asociación de ciudades con cuevas-bodegas.
Por su parte, Valentín Rincón Blas de la Asociación de la localidad de Dueñas, expresó que tras diez años de actividad -con 80 socios actualmente-, se buscaba siempre la conservación y promoción de las cuevas y las bodegas.
Por ello, ha explicado, que se estaban realizando distintas actividades como talleres prácticos donde se forraban de chapa las puertas de entrada que eran de madera y se lleva a cabo también el rejuntado de las fachadas.
Expuso ser necesario que los estudiantes tuvieran conocimiento de la importancia de conservar estas construcciones que muchas de ellas se usaban como Peñas o merenderos.
En este periplo añadía que se habían realizado distintos concursos de fotografía, de vinos caseros, rutas guiadas para finalizar las mismas degustando un buen vino y donde la acogida estaba siendo muy destacada con una media de unas 60 personas que disfrutaban del momento. También Catas a ciegas de vinos en rama, ponencias, mesas redondas y diseño de videos promocionales.
Actualmente terminó diciendo, que se estaba produciendo una fase de investigación, documentación y catalogación de cuevas.
El acto concluyó con las palabras del presidente de la Asociación de amigos de las Cuevas de Tomelloso, Jesús Andújar, que tuvo palabras de agradecimiento hacia ángel Bernao “el principal culpable y promotor de este congreso”.
“A pesar de la historia tan corta de nuestra asociación, son muchas las metas a conseguir, pero queremos seguir dando a conocer el gran patrimonio oculto que tenemos debajo de nuestros pies”, aseguraba y “poder colaborar con al Ayuntamiento para que así sea”.
Relató las distintas actividades que desde los inicios se habían realizado como el bus de las cuevas, donde el primer sábado de cada mes personas de otras ciudades vienen a Tomelloso y se realiza una ruta “a pesar de no haber salido el proyecto como quisiéramos”, como las Jornadas de Puertas Abiertas y una nueva actividad que anunció modo primicia donde más de 1500 estudiantes de la ciudad podrán visitar algunas de las cuevas en el mes de marzo.
En otro orden de cosas, significó la importancia de poder declarar las cuevas de Tomelloso como elementos de interés cultural de cara a su promoción, entrar dentro de las Rutas del Vino de Castilla-La Mancha y a largo plazo intentar promover la creación de la Red Española de Cuevas Enológicas.
Finalmente, y a la conclusión de la jornada, los miembros de las tres asociaciones se desplazaron a cenar al restaurante Casa Justo para seguir compartiendo vivencias.