Sin lugar a dudas, el cultivo del pistacho ha progresado de forma muy acelerada en Castilla-La Mancha, llegando a tener el 80% de la superficie plantada a nivel nacional.
Pistalife nace para trabajar por la unión de agricultores que disponen de plantaciones de pistacho y para ofrecer una alternativa fiable para su desarrollo, proceso y comercialización.
Cuadernos Manchegos ha visitado las instalaciones de esta gran cooperativa, creada hace casi dos años con los primeros agricultores cultivadores de la planta del pistacho, que, hoy en día, representa el cultivo de mayor importancia nacional en cuanto a superficie cultivada.
Su presidente, Benito Díaz y la gerente de la Cooperativa, Esmeralda Díaz Carretero, nos mostraron y explicaron las vicisitudes que formaron parte de la iniciativa, que ya es un ejemplo para los cultivadores y que actualmente va creciendo en número de socios.
Comentaron las primeras dificultades en la creación de la Cooperativa, por ser un proyecto amplio y un tanto desconocido en cuanto al producto a comercializar, haciendo hincapié en la lógica desconfianza de los cultivadores en este tipo de Cooperativas y reseñaron como principales dificultades la desconfianza y falsos comentarios de los productores por la comercialización del producto.
Benito Díaz, ahondó sobre la problemática de la comercialización del producto cuando se realizaba de forma individual, por desconocimiento del mercado y de las transacciones comerciales poco fiables, lo que indujo a comentar la posibilidad de agruparse para poder acumular mayor volumen de producto y poder hacer más presión al mercado comprador.
También afirma, que se encontraron con el desconocimiento de la maquinaria necesaria empleada para el proceso de transformación y el coste de la misma, lo que supuso un desembolso que la propia cooperativa con sus socios hubo de estudiar, ayudada por la entidad Globalcaja, que apoyó en la financiación; lo que supuso el despegue, que dio como resultado la realización de todo el proceso final hasta el secado del pistacho, así como su posterior clasificación.
La cooperativa, además, se encuentra incluida actualmente dentro de otras asociaciones cooperativas, agrupadas en un A.P.A., para mejorar los procesos de comercialización y cooperación y no bastante, con esta agrupación, se está poniendo en marcha la posibilidad de realizar la integración de las cooperativas como Entidades Asociativas Prioritarias (EAP), que proporcionaría mayores posibilidades.
Actualmente la Cooperativa Pistalife, ofrece a sus socios la seguridad de su entrega de pistachos, así como la garantía de poder disponer en todo momento de los datos concretos de su cosecha y su situación, de igual forma como la de realizar todo el proceso de elaboración del producto en verde recién recolectado y su entrega en la cooperativa, con la disponibilidad de tolva instalada, separación de hojas y racimos, peladora para retirar la piel, pasado por una báscula en húmedo, tanque, presecadora, separador de “peludos” y el secado posterior de 24 horas, con lo que la mercancía queda dispuesta para su comercialización.
Posteriormente, se procede a la segunda fase de comercialización con la clasificación de tamaños comerciales y la necesidad de una venta temprana para evitar los problemas que podrían presentarse por la aparición de polillas, que podían dañar al producto y que sería necesario envasar al vacío o introducirlas en cámara frigorífica.
Reseñaron que el mercado actualmente estaba muy abierto y su empleo se ha diversificado también para el pistacho llamado “cerrado” que se utiliza para pastas y uso culinario.
En cuanto al cultivo en sí, indicaron que se han producido comentarios no de acuerdo con la realidad, siendo cierto que el periodo de entrada en producción es largo, por lo que muchos agricultores se lo piensan antes de incluso integrarse en las cooperativas, pero que el pistacho de Castilla-La Mancha, es uno de los cultivos de mayor porvenir en el futuro, pues se encuentra muy adaptado al terreno y a la climatología, huyendo de las heladas, fácil de cultivar y con recogida mecánica, además aporta una calidad mucho mejor, comparados con los pistachos americano e iraníes, añadiendo que la variedad existente actualmente, además de otras, llamada Kerman, estaba dando excelentes resultados, situándose su recolección a finales de septiembre y primeros de octubre.
Esta Cooperativa afirma que con esta forma de cooperación, puede aportar a los agricultores un valor añadido, además de otros servicios como asesoramiento técnico, enfoques económicos sobre aportaciones, pero insistieron como base fundamental de su actividad la de aportar a los pistacheros socios: confianza, transparencia y garantía.
En sus dos años de funcionamiento la Cooperativa ha demostrado la eficacia de la unión de sus socios y de la Junta Rectora en cuanto a la defensa de sus intereses y, en el próximo mes, tienen preparadas unas Jornadas dirigidas a agricultores, entidades y empresarios parar mostrar su funcionamiento y las instalaciones del proceso de manipulación del pistacho.
Desde Cuadernos Manchegos, queremos agradecer la confianza depositada en nuestro Medio de comunicación para ser el altavoz del funcionamiento de la Cooperativa.