Es indudable el reconocimiento que tiene la cocina manchega tan característica y típica de nuestra región a nivel no solamente nacional, sino reconocida fuera de nuestras fronteras.
Las gachas manchegas, el pisto manchego, nuestras migas manchegas, los atascaburras, la típica caldereta de cordero, y otras variadas muestras de nuestro quehacer doméstico. Pues bien, en todas ellas interviene un alimento que también es único y exclusivo de nuestras tradiciones regionales y especialmente de la provincia de Ciudad Real.
Nos estamos refiriendo a lo que todos conocemos como “Pan de Cruz”, también nombrado como “Pan de Campo”, pues efectivamente, donde mayor empleo y uso ha tenido, y tiene, a lo largo de los tiempos ha sido siempre un producto que se utilizaba principalmente en las largas jornadas de campo de los labradores y ganaderos, como alimento básico de su sustento diario y que se ha venido elaborando desde el siglo XIII.
El Pan de Cruz se confeccionaba con masa de trigo del típico candeal, del que, una vez amasada de determinada forma, se consigue una pasta de color blanco y gran espesor y a la que se daba su forma tradicional y original de hogaza.
Además de estas precisiones, otra de sus características diferenciadoras eran unas marcas que, en forma de cruz, se realizaban antes de pasar por el horno, de donde procede su apelativo y que se entiende como signo cristiano, que daba alusión a la Cruz de Calatrava, que, como todos sabemos, era una orden religioso-militar fundada en 1158 por el abad Raimundo de Fitero en defensa de la villa de Calatrava en nuestra Ciudad Real.
En Tomelloso, y al igual que la mayoría de las poblaciones manchegas, el pan se llevaba al campo para los días de permanencia en las labores agrícolas y se introducían en la barja y se la enfundaban con un trapo húmedo, con lo que se conseguía que el pan conservara sus propiedades alimenticias durante varios días y fue herramienta fundamental en la presencia de las comidas del campo.
Hoy en día se continúa elaborando los panes, aunque también se hacen con formas distintas y con la señal de la cruz, como en forma de barras de panecillos, de rosca, también actuales.
- IGP del Pan
El Pan de Cruz se encuentra incluido en la lista de la Comisión Europea reconocida como IGP (Indicación Geográfica Protegida) que asume el reconocimiento de este producto típico y la defensa de su identidad.
Actualmente, además del manchego. solamente existen en España tres tipos de pan que reúnan esta protección: Pan Cea de Galicia; Pan de Pagés de Cataluña; Pan de Alfacar de Granada. Además, la IGP de Pan de Cruz se limita su fabricación en la provincia de Ciudad Real y no puede precocerse, ni dar congelado.
Se celebra el Día Mundial del Pan en fechas de mediados de octubre, donde se celebran en la mayoría de las ciudades de España con ofertas de distintas especialidades, teniendo en cuenta que en nuestra región de elaboran 44 tipos de pan, aunque se especifican como propios unos17 y que el Ministerio solamente reconoce para nuestra región dos tipos. La celebración se realiza at través de la Asociación Panaderos de AFEXPAN y en la provincia existen unas 2.000 panaderías.
- El Pan manchego en el Quijote.
En la obra de Miguel de Cervantes aparecen distintas menciones a nuestro pan.
… «… los duelos con pan son menos».- (II-XIII)
… «Todos los duelos con pan son buenos». -(II-LV)
… «…váyase el muerto al hoyo y el vivo a la hogaza».-(I-XIX)
… «A quien cuece y amasa no le hurtes la hogaza».-(II-XXXIII)
… «…y pues tenemos hogazas, no busquemos tortas».-(II-XIII)
… « Tan buen pan hacen aquí, como en Francia».(II-XXXIII)
