La portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Socuéllamos, Elena García Zalve, ha vuelto a lamentar la actitud “opaca y a la defensiva” del equipo de gobierno de PP y Vox mostrada en el último pleno municipal, ante la fiscalización y el trabajo de la oposición, donde “en vez de responder y estar a la altura política para asumir esas críticas, y sobre todo, esa responsabilidad que tienen como gobierno, utilizan el ataque y la crispación que venimos denunciando pleno tras pleno para evitar dar oportunas explicaciones, lo que dice mucho de la poca altura política de este equipo de gobierno”.
La portavoz socialista recordaba que la propia alcaldesa reconoció en el pleno haber actuado de manera irregular en el desarrollo y la gestión del Sunset Festival que se celebró en el municipio, con la misma alcaldesa y la concejala de Cultura vendiendo entradas de manera descontrolada y sin las pertinentes medidas de seguridad, llegando incluso a abrir las puertas en algunos momentos permitiendo el acceso libre sin el oportuno control de menores al recinto, por una supuesta “solidaridad”, como la propia alcaldesa argumentó, sobre la cual evitó dar explicaciones pese a reconocer esa irregularidad.
Ante estas actuaciones de “autoritarismo, despotismo y caciquismo”, desde el Grupo Municipal Socialista “no vamos a permitir que una vez más el Ayuntamiento de Socuéllamos se convierta en el cortijo de quienes hoy lo gobiernan”, de ahí que “nos preguntemos qué opina el grupo municipal Vox, socio de gobierno, sobre la libertad asumida por la alcaldesa para cometer y reconocer estas irregularidades, unas actuaciones intolerables y sobre las que vamos a indagar e investigar hasta las últimas consecuencias para averiguar toda la verdad después de que la alcaldesa reconociera y se atribuyera esas irregularidades tanto en Comisión como en el Pleno municipal, porque no podemos permitir que se sigan realizando y que la alcaldesa vea con normalidad y los justifique en el simple hecho de que es la máxima regidora”.
Este equipo de gobierno, en vez de dedicarse a gobernar y gestionar con buen criterio, o al menos “simplemente a gobernar y gestionar”, parece que está en una campaña electoral permanente, dedicándose a “regalar besos y llevando a cabo actuaciones que lo único que persiguen es el abrazo fácil hacia una alcaldesa que una vez más vuelve a demostrar falta de gestión y de responsabilidad, como así se le recriminó el hecho de que por ser la máxima regidora no tiene un cheque en blanco para poder hacer lo que le dé la gana”.