La alcaldesa de Tomelloso, Inmaculada Jiménez, agradeció a todos los presentes su asistencia en un día que podía ser la puesta de largo de Francisco García Pavón y de las actividades programadas, recordando las ya realizadas como Planes de lectura, Reuniones y charlas, Cuenta-cuentos y Rutas Literarias con las que se está consiguiendo involucrar a todo el mundo en el conocimiento de nuestro ilustre escritor.
Por su parte José Manuel Caballero dijo estar especialmente contento por celebrar nuestros orígenes que hacen que no perdamos nuestra identidad y que debemos no olvidar celebrarlo todos los días y años a un personaje que supo actuar con esa socarronería que nos hace diferentes, pero que en definitiva somos todos iguales.
Señaló la necesidad de acercar a los jóvenes la figura de García Pavón por ser una labor necesaria, afirmando que “nuestra tierra es cultura, literatura y gastronomía”.
Sonia García Soubriet, hija del escritor, intervino diciendo que su padre no recordaba nunca lo que comía y que no era gastrónomo, pero, sin embargo, siempre hablaba de comidas y de recetas y especialmente del ritual en la preparación. Explicó que habiendo conocido a Marquinetti por primera vez, recuerda unas declaraciones del mismo que expresaba que su labor era el amor al trabajo y el tesón, aspectos que su padre también reunía.
Rafael Torres, como Presidente de la Cooperativa Virgen de las Viñas, que ha preparado un vino especial con su logotipo para este acontecimiento, agradeció a la Alcaldesa y al Presidente de la Diputación por este acontecimiento, esperando que el vino presentado “esté a la altura de la pizza preparada por Marquinetti”, recordando lo mucho que debía personalmente a García Pavón porque fue su profesor de Gramática en el bachillerato.
Finalizó el acto Jesús Marquina explicando la preparación de la "Pizza Plinio", indicando que los ingredientes estaban basados en los lugares donde el escritor había pasado gran parte de su vida: Oviedo, Madrid, Benicasim y Tomelloso y, precisamente, ha elaborado una pizza con los ingredientes típicos de cada una de las zonas: así de Oviedo los callos con bacalao y los garbanzos con espinacas fusionando ambos ingredientes como base e incorporando espinacas en dos texturas, incluyendo las alcachofas de Benicasim, con el queso manchego y bacalao.
