Según declaraciones de la Unión de agricultores y ganaderos de Castilla-La Mancha, en contra de lo que podría pensarse, el Programa de Desarrollo Rural no nutre, en exclusiva, como sería lógico, al sector agropecuario, pues proviene del mismo fondo europeo, que es la PAC y supone una parte de la compensación de renta del agricultor por los bajos precios en origen. Por el contario, además de que la Consejería de Agricultura chupe de la ubre, también está la Consejería de Desarrollo Sostenible. El dinero de los programas de desarrollo rural no es un fondo autónomo, sus caudales se detraen de la PAC, por tanto, cada vez que se coge un solo céntimo del presupuesto para fines no agropecuarios se roba dinero a agricultores y ganaderos.
A través de la Consejería de Desarrollo Sostenible, se desvía dinero para GEACAM, cierto es que se lleva a cabo de forma indirecta, mediante los encargos de gestión, pero no por ello menos real. Si tenemos en cuenta que GEACAM se adjudica 500 millones de euros del PDR y que el siguiente Programa sufre un recorte de otros 500 millones de euros frente al actual. Se podría decir que el campesino castellano manchego ve como vuelan dos tercios de un dinero en principio a él dirigido. Unión de
Uniones de Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha lleva tiempo clamando como voz en el desierto por esta situación. Salvo el apoyo de partidos de la oposición no ha encontrado más eco, ni en las otras OPAs, ni en Cooperativas Agroalimentarias. Siendo que todos estos son supuestos representantes del campo es incompresible su postura. Solo explicable si recordamos esos 700.000 € que anualmente llueven a estas organizaciones, por gracia de Dios